El yoga corteja al deporte: Power Yoga for Sports contado por Tania Rada Martinez
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El yoga ya no es lo que era hace años, algo reservado a pocas personas y de difícil acceso. Gracias a la tremenda difusión de centros de enseñanzas y a la gran cantidad de material que ha llegado a todos los hogares por medio de internet, esta disciplina está al alcance de todos. En particular uno de los tabúes que se ha roto es la adopción del yoga por parte de deportistas de alto nivel como manera de complementar los entrenamientos y mejorar la concentración y la flexibilidad (puedes descubrir aquí algunos de los pesos pesados que han introducido el yoga en sus rutinas de entrenamiento).
Pero no vamos a hablar hoy de deportistas, sino que vamos a descubrir qué pasa al otro lado de la sesión de yoga, cuando es el maestro el que habla. Mad4Yoga ha entrevistado Tania Rada Martinez, que aplica el Power Yoga For Sports (PYFS) para entrenar deportistas de élite de cualquier deporte. Empezó el año pasado con el equipo masculino y femenino de Waterpolo de NCA en Saint-Jean-d’Angély. Este año se encarga de introducir el PYFS y la preparación mental del equipo de Waterpolo y Natación Sincronizada de Sète Natation EDD y el de Arago de Sète Volley Ball.
Tania, cuéntanos algo sobre ti.
Me siento inconformista por naturaleza y amante del aprendizaje en todas sus facetas. Lo fácil, lo cómodo y hacer las cosas porque “siempre ha sido así”, nunca fue conmigo.
He dedicado muchos años a estudiar «por placer” mis dos pasiones: la mente y el cuerpo (a través del yoga). Además, al compartir mi vida con un profesional del deporte, veía muy claro los beneficios físicos y mentales que el yoga podía aportar a los deportistas, pero no tenía muy claro cómo introducirlos sin alterar mucho su ya saturada rutina de entrenamiento. Fue cuando descubrí el PYFS y me fascinó tanto que dejé mi “seguridad laboral” para embarcarme en la aventura de conquistar el mundo del deporte con el yoga y el trabajo mental como armas. ¡De momento ya son varias las conquistas en tierras Galas! ¡¡Y seguimos batallando!!
¿Qué aporta el yoga a los deportistas de élite a nivel tanto físico como mental?
A nivel físico aporta más control sobre su cuerpo. Más consciencia de qué músculo utilizan cuando hacen un movimiento (sacar, lanzar el balón etc…). Tener consciencia es el primer paso para poder mejorar, fortalecer y controlar los movimientos. Esto evita lesiones (que en muchas ocasiones vienen por un mal uso del cuerpo). Más elasticidad, más fuerza y más control del cuerpo dan lugar a más potencia.
A nivel mental, los deportistas están en posiciones incómodas entre 2 y 10 minutos. Poco a poco aprenden a estar “cómodos” en ellas, a controlar el estrés que éstas pueden provocar. Este control se traslada después al campo durante el partido. El control del cuerpo y de la mente se hacen visibles en muy poco tiempo. Los jugadores dejan de lesionarse con tanta frecuencia, no decaen mentalmente con tanta facilidad ni pierden los estribos a la mínima.
Esta disciplina, que comenzó a desarrollarse en EE.UU., ¿en qué escuelas tradicionales se basa? ¿qué raíces tiene?
PYFS es un programa creado por Gwen Lawrence basado en el Power Yoga y hecho “ad hoc” para deportistas.
¿Qué duración y periodicidad tienen sus entrenamientos? ¿Permite alguna «licencia» el trabajar con deportistas profesionales? ¿Es un yoga más intenso o exigente a nivel de resistencia o flexibilidad?
La duración depende de los equipos y de sus rutinas, pero puede oscilar entre 45 minutos a dos horas y media a la semana. La única “licencia” que te permite es el placer de entrar en el «staff técnico» de un equipo de élite. La ética profesional no te permite ninguna más. Lo que PYFS aporta es un yoga específico para cada deporte. Nosotros estudiamos cada deporte y cada posición para ver dónde se requiere más elasticidad, dónde más potencia y qué “asanas” o posturas de yoga se pueden adoptar para incrementar ambas.
Cada disciplina deportiva tiene un conjunto de asanas que le beneficia, y sobre las que se basa cada sesión de yoga. Aparte del trabajo general que se realiza con cada equipo, tenemos que resaltar el exhaustivo y específico trabajo individual con los jugadores, dependiendo de su posición de juego (por ejemplo, en el baloncesto, no es el mismo trabajo el del pivot que se dedica especialmente a saltar y a coger rebotes que el base, cuya función principal es la de distribuir el juego). Muchos de los deportistas califican la clase de yoga como la “más exigente e intensa” de la semana pero todos destacan sus beneficios, especialmente en la reducción del número de lesiones y un aporte importante a nivel mental a la hora afrontar situaciones adversas a lo largo del partido (por ejemplo, mantener la motivación tras una remontada del rival).
¿Cómo conoció el PYFS y desde cuándo lo practica y enseña?
El PYFS lo conocí “por causalidad” (no creo en la casualidades) hace unos años, y lo puse en práctica la temporada pasada 2014/2015.
¿Ha trabajado con otros equipos deportivos o atletas?
Con equipos de élite: equipos de waterpolo (masculino y femenino), natación sincronizada y volley masculino. El año pasado también daba clases de yoga deportivo (una mezcla de Yoga Vinyasa y Dinámico) a gente “no profesional” a la que acudían, entre otros, tenistas, atletas, nadadores, y esquiadores.
En el caso del equipo de NCA, el encuentro con el yoga no era algo planificado desde el inicio de temporada… ¿cómo se le ocurrió incluirlo en los entrenamientos?
Con NCA estaba planificado entrenar una vez a la semana con las chicas, aunque pronto el número de sesiones se ampliaron a dos e incluso tres a la semana. Los chicos empezaron a finales de octubre. Mi marido (entrenador de los chicos) cree firmemente en los beneficios de yoga, pero el waterpolo requiere entrenar muchas horas en el agua y con unos horarios tan exhaustivos no le resultaba fácil sustituir una sesión «estándar» para remplazarla con una de yoga. Pero tras ver los beneficios con el equipo de las chicas, pronto encontró una hora y cuarto a la semana. Y esta temporada son dos las sesiones de yoga a la semana…
¿Cuál fue la primera reacción de los deportistas?
La primera reacción fue “el yoga es de relax y es para mujeres”. Con sólo los dos primeros minutos, ya se dieron cuenta de lo equivocados que estaban. Les parecía muy duro pues tanto las posiciones de fuerza como las de elasticidad, implican mucho control mental. Pero hoy todos resaltan los beneficios que les aporta tanto a nivel físico como mental.
Equipos como los NY Yankees entrenan ya a sus deportistas con una base de yoga… ¿existen deportes más proclives que otros a aprovechar los beneficios del yoga? ¿Quizás los deportes en equipo?
Yo creo que todos los deportes se pueden beneficiar del yoga. Individuales como colectivos. Supongo que aquellos que requieren más esfuerzo físico, potencia y elasticidad, aprovechan más a nivel físico que aquellos que son más estáticos (como por ejemplo el tiro con arco). Aunque es cierto que en los deportes individuales se requiere una mayor capacidad mental, ya que estás “sólo ante el peligro”. Cuando fallas, lo haces tú sólo, y continuar motivado sin venirte abajo no es tarea fácil. Así que el yoga podría también aportar mucho a nivel físico y mental en los deportes individuales.
¿Como practicante de yoga… cómo fueron sus inicios?
Descubrí el yoga hace más de una década y me fascinó. Era el único vehículo que me permitía hacer una parada en «el aquí y ahora”. Ser consciente de lo que estaba haciendo y sintiendo en ese preciso momento.
Me metí de lleno. El yoga estaba presente las 24 horas del día. Empecé en Puzol con Yoga dinámico. Iba a clase de 2 a 4 veces por semana (según mis horarios de trabajo). En casa aprovechaba cualquier momento para practicar alguna asana. En Francia empecé a practicarlo a través de “My yoga online” y eso me hizo conocer diferentes estilos y muy diversos profesores, de los que fui aprendiendo e integrando en mí un poquito de cada uno de ellos/as. PYFS reforzó mis estudios de anatomía y el trabajo mental, y después me formé en la India en Vinyasa, Ashtanga, Hatha y Terapéutico.
¿Existen escuelas de formación de maestros en España o Europa?
En España no sé si existen escuelas en las que se enseñe a aplicar el yoga en el deporte de forma tan específica (yo las desconozco). Existen formaciones de los diferentes tipos de yoga en general.
Mi marido y yo tenemos en nuestros planes para el verano de 2016 o 2017 hacer Clinics (conferencias) para difundir, él sus conocimientos de waterpolo, y yo los beneficios del yoga y la preparación mental para el waterpolo en particular y para el resto de los deportes en general. Me parece increíble como en equipos importantes existe la figura de psicólogo deportivo pero que en muchísimas ocasiones su labor se limite a preguntar cosas como “qué tal la familia, con tu novia, estudios… etc”. Cuando yo creo, desde mi más humilde opinión, que ese enfoque está muy equivocado.
Un psicólogo deportivo o preparador mental (me parece más apropiado el segundo apelativo) debe ayudar al jugador a aprender a superar sus miedos en la cancha, tener control sobre el estrés o la frustración cuando pierden, seguir motivados cuando cometen un error como fallar un penalty… Controlar su agresividad cuando creen que el árbitro está siendo injusto. Mantener su motivación a lo largo de todo el partido o controlar su efusividad cuando se ponen por delante en el marcador de un rival “a priori” superior. La mente juega un papel muy importante en el deporte, y se debería trabajar igual o más que el cuerpo. En EEUU esto es habitual, en España y Francia no, al menos de momento. Estoy convencida de que poco a poco iremos introduciéndolo con más y más fuerza.
Te agradecemos mucho tu aportación para Mad4Yoga, ¿quieres decir algo a nuestros lectores?
El yoga podría ayudar a mucha gente. Yo he optado por el deporte porque me apasiona y porque estoy muy vinculada a él. Pero hay un amplio abanico de sectores dónde se podría aplicar. Estoy segura de que ayudaría y beneficiaría a mucha gente: centros de desintoxicación, centros penitenciarios, residencias de ancianos, hospitales…. El yoga nos hace ser conscientes del “aquí” y del “ahora”. Nos quita ese “piloto automático” que nos aleja de la realidad. Pensamos mucho en lo que acabamos de hacer y en lo que vamos a hacer sin disfrutar de lo que “ahora” estamos haciendo. Volver al presente, ser consciente de lo que pasa en tu interior y a tu alrededor te ofrece la posibilidad de conocerte, de llevar las riendas de tu cuerpo y de tu mente. El control da poder, confianza; y la confianza, motivación. Confianza y motivación para hacer lo que deseas en tu vida, sin que nadie te condicione, sin dejarte llevar por el vaivén del tiempo, de las modas o de quienes desean de alguna manera controlarte.
El yoga es el vehículo que te permite parar y disfrutar del aquí y del ahora, porque la vida es para vivirla, no para verla pasar.
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